1. Ponemos en un cazo agua a fuego medio, y cuando se caliente añadimos el azúcar, la sal, la mantequilla, la piel de limón y la esencia de vainilla.
2. Quitamos la piel de limón e incorporamos la mantequilla y mezclamos hasta que se derrita
3. Bajamos el fuego e incorporamos la harina y continuamos mezclando hasta obtener una masa que no se pegue
4. Dejamos reposar 15 minutos a la masa fuera del fuego, e incorporamos el huevo uno a uno.
5. Hacemos las bolitas con dos cucharadas hasta obtener una forma redonda y los freímos en una sartén con el AOVE bien caliente.
6. Una vez estén dorados los buñuelos, los sacamos, rebozamos con el azúcar y la canela y dejamos enfriar en un papel absorbente
¡Y LISTO! Así de sencillo, bueno, bonito y barato ¿para qué mas? 🤩
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